Calatrava.
Orden de Calatrava. Fundada con carácter militar y religioso en el año 1.158 por el abad cisterciense Raimundo Serra de Fitero (posteriormente San Raimundo) y su compañero de orden Diego Velázquez, para defender la villa de Calatrava del ataque de los musulmanes, tras la renuncia de la Orden del Temple a hacer esas funciones. Los caballeros llevaban el hábito cisterciense con una cruz rojaflordelisada en bordado en el manto blanco. La Orden fue aprobada por el Papa Alejandro III y adoptó la Regla de San Benito. Alcanzó un enorme poder y numerosos monarcas le otorgaron multitud de privilegios, donaciones y dispensas. Los Reyes Católicos incorporaron el maestrazgo a la corona. Llegó a tener bajo su jurisdicción más de trescientas cincuenta villas y unas doscientas mil personas habitaban sus territorios.
En tiempos de Alfonso XI trasladaron la residencia del maestre de la orden a Almagro.
Su emblema distintivo es una cruz roja con cuatro lises en las puntas.
Desde el siglo XIII existe una rama femenina de la orden, conocida con el nombre de Calatravas.
En tiempos modernos, extinguidas las órdenes militares, la representación de las mismas, recae en el obispo de la Diócesis de Ciudad Real.
El nombre de esta calle se debe, al igual que la plaza del mismo nombre, a la existencia del convento de Caballeros de Calatrava. Es posible que conserve el nombre desde el tiempo de la Conquista, por haberse establecido en este territorio la casa e iglesia anexa a la orden militar de Calatrava, y como dato curioso se recuerda que en la plaza había, como en otros puntos de la capital, un altar inamovible dedicado a Nuestra Señora contra la Peste, construido en 1.647, con un lienzo realizado por Jacinto Gerónimo Espinosa. Esta memoria religiosa se debía a la circunstancia terrible de la peste que afligió en aquella época la ciudad.
Tuvo otros nombres, como Mossén Beneyto referido a…
“…un ejemplar caballero y sacerdote a quien siendo secular y proveedor de los trigos en la isla de Sicilia por la ciudad de Valencia, llamaban los de Palermo al Santo Español…”
También fue conocida esta calle como el de Cesteros.
Puede tener origen su rótulo en el año 1.373. Por acuerdo municipal de 26 de junio de 1.899, las calles Calatrava, San Bartolomé y Torno de la Compañía, se unificaron bajo el rótulo de Calatrava.
Fuentes consultadas:
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Archivos autores
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Archivo del Reino de Valencia
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Archivo Histórico Municipal
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Biblioteca valenciana
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Biblioteca Histórica de la Universidad de Valencia
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Archivo de la Diputación provincial de Valencia
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Hemeroteca valenciana
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Wikipedia
Bibliografía
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Las calles de Valencia y pedanías, Rafael Gil Salinas y Carmen Palacios Albandea